Pocos escritores o escritoras alcanzan el nivel de género literario en sí mismos. Lindsey Davis es la escritora del género de la Antigua Roma. Dicho así suena grandilocuente. Pero no se puede calificar o etiquetar de otra forma a esta escritora inglesa cuya fascinación por el Imperio Romano se ha convertido en su obra, en su argumento, en su escenario. Parece como si Lindsey Davis fuera una cronista de la época encarnada en su nuevo papel de escritora actual.
Lindsey o la reencarnación de Tácito, o de Tito Livio. Solo que, una vez liberados de su compromiso histórico, estos historiadores hubieran tomado la voluntad de hacer literatura de misterio en base a los grandes enigmas que esta gran civilización acabó extendiendo paralelamente a su lengua, ciencia, costumbres, creencias, mitología y hasta política.
En torno a treinta libros acompañan a una escritora que ha sabido hacer de ese gran salto cronológico de la Roma antigüa hasta nuestros días un fértil campo donde indagar y también divagar, donde encontrar argumentos y plantear enigmáticos aconteceres.
Toda una vida entregada a la obra gracias a la cual ha hecho acopio de una sabiduría y una capacidad incomparable para hacernos presentes aquellos días en los que Roma gobernaba sobre todo el mundo conocido.
Top 3 novelas recomendadas de Lindsey Davis
El cementerio de las Hespérides
Su última novela publicada en España, penúltima de la serie Flavia Albia nos adentra en el submundo de la Roma más popular y oscura.
Las Hespérides eran unas ninfas de la mitología griega que custodiaban un jardín deslumbrante que aparecía como un oásis en el norte de África.
En este libro el supuesto jardín se convierte en eso que ya anuncia el título: en un camposanto. Flavia Albia, hija de Marco Didio Falco, personaje estrella de esta autora, participa en el descubrimiento del cuerpo de un joven tabernero fallecido algún tiempo atrás.
Pese a que Flavia podría obviar el descubrimiento para seguir entregándose a su cómoda vida junto a Manlio Fausto, con quien planea casarse, lo cierto es que la aparición del cadáver acaba tocándole alguna fibra sensible que la impele a saber más sobre el malogrado joven que fue enterrado toscamente en el jardín.
Desde su potentado estrato social, Flavia se conduce a través de los infernales espacios de la Roma más profunda, donde las gentes paladean los amargos sinsabores morales de sus destinos. Es entonces cuando la autora hace gala de su vasto conocimiento de este periodo histórico para prodigarse en detalles tan fascinantes como escabrosos, de una realidad que sin duda acompasaba la vida más profunda de la ciudad imperial.
Cantinas de mala muerte donde las mujeres mendigaban sexo por supervivencia, donde la violencia se convertía en ley y la existencia solo podía darse mediante pactos con el diablo, el único que parecía establecer algún tipo de pauta en ese submundo.
Flavia se enfrenta a la fragilidad de la vida. Y pese a que lo más fácil, natural y propio sería regresar junto a los suyos, a ese mundo de luz, agasajos y buenos modales, acaba descubriendo que algo la vincula a ese espacio remoto de perdición. Sólo le queda confiarse a los dioses para no terminar por sucumbir en ese inframundo.
Una conjura en Hispania
Quizás no sea, en lo estrictamente literario, una de las mejores obras de la autora. Pero el hecho de desarrollarse en Hispania siempre tiene su atractivo para todo lector de esta vieja «Tierra de conejos» (traducción de Hispania más ajustada a la realidad según mi viejo profesor de Historia)
En España somos muy de olivares de donde sacar estupendas aceitunas y divinos aceites. Un bien muy preciado. Así que cuando un soldado del emperador Vespasiano es hayado muerto y su asesinato es asociado al mercado del ingrediente de oro, Marco se lanza a un investigación que lo conduce irremisiblemente hasta Corduba. Tal como podemos imaginar, los intereses, la corrupción, el poder…, componen un relato estimulante sobre costumbres, idiosincrasia, naturaleza del ser humano.
Un escenario maravillosamente perfilado por Lindsey, capaz gracias a su conocimiento del periodo histórico, de describir con brevedad para mostrarlo realmente todo…
Marco, acompañado de Helena Justina se enfrentará a muchos peligros y a difíciles decisiones en lo personal. Una novela entretenida y con un doble hilo en su trama que acaba hilvanándose a las mil maravillas. Se trata de la octava entrega de la serie Marco Didio Falco.
Némesis
Con esta XX entrega de la serie Marco Didio Falco, la autora cerró la más aclamada de sus series. No debe ser fácil avistar esa intención finalista sin considerar la obra final redonda, el punto y aparte que satisfaga a tantos seguidores. Pero Lindsey lo consiguió.
Imprimió a esta última aventura de Marco y Helena más violencia, grandes dosis de humor e ironía así como un alarde en la caracterización y en la psique de unos personajes que se hacen tan extrañamente cercanos pese a la distancia temporal…
En resumen una más que interesante obra que toma como eje central a un Marco sobre el que se desarrolla la trama completamente. Las propias circunstancias personales de este particular héroe de la antigüedad sirven para que lo conozcamos en lo más personal, para que ese vibrante personaje nos deje un sabor de boca final completamente glorioso en el descubrimiento de su esencia y de la lucha contra su némesis.
